Ya conocíamos que el
famoso videojuego creado en 1984 podía aportarnos ciertos beneficios en
nuestras habilidades mentales.
No sólo nos ayuda a mejorar la coordinación, sino que además, se demostró una mayor capacidad cerebral (pensamiento
crítico y optimización del lenguaje) en aquellas personas que solían jugar al
videojuego.
Según una nueva
investigación, jugar al
Tetris también puede ayudarnos a reducir las ganas por
comer, consumir drogar o realizar actividades como dormir o tener
sexo. Tan sólo tres minutos de juego en cada ocasión nos permite debilitar
esta fuerza hasta una quinta parte. Los autores del estudio, psicólogos de la
Universidad de Plymouth en el Reino Unido y la Universidad Tecnológica de
Queensland en Australia, comprobaron que jugar al Tetris interfería con los
deseos. Además, los resultados se podrían ampliar a otras sustancias
como tabaco, alcohol y café.
El equipo ha comprobado
que jugar a este videojuego podría ayudar a las personas a lidiar con sus
anhelos y piensan que esto es debido a que para anhelar algo necesitamos hacer
uso de nuestra imaginación. Necesitamos imaginar la experiencia, nos imaginamos
fumando un cigarrillo, tomando alcohol u otras drogas o teniendo sexo con la
sensación placentera que todo ello nos produce.
¿Qué ocurre entonces
cuando jugamos a este videojuego? En pocas palabras, lo que ocurre es que
para poder jugar al Tetris es necesario hacer uso de los mismos recursos
mentales que se utilizan para reforzar los anhelos. Al estar haciendo uso de
estos recursos para el videojuego nos dificulta estar al mismo tiempo
imaginando alguna situación deseada reduciendo así su fuerza.
Sería importante destacar
que en el estudio se hace uso del videojuego durante muy pocos minutos cada
vez. La idea no es sustituir la ansiedad que tenemos ante la adicción por otro
tipo de actividad placentera como es jugar a este videojuego y que, a su vez,
puede ser adictiva. Algo paradójico que uno de los videojuegos más adictivos
nos pueda ayudar a aliviar la ansiedad que tenemos por otras adicciones...pero
así es. El objetivo es ayudar a reducir la ansiedad que nos impulsa a hacer
aquello que nos perjudica haciendo que nos olvidemos de los motivos por lo que
no debemos hacerlo.
Bien es cierto que, a veces, nos encontramos personas que se están rehabilitando de una adicción y vemos que, ahora que no consumen, que han dejado el alcohol, dedican mucho tiempo a apostar con los amigos en algún juego, por ejemplo. Quizás, rehabilitar a una persona de una adicción no sea más que “sustituir esa adicción por otra” que tolere mejor, que controle de mejor manera o que le perjudique en menor medida. Quizás, la persona sea tan impulsiva que siga necesitando alguna actividad muy reforzante, muy placentera. Alguna actividad que utilice los mismos recursos mentales que utiliza para la adicción y que calme esa ansiedad de manera temporal, que la calme el tiempo suficiente como para controlar por sí misma la adicción primaria. Quizás, todos necesitamos en alguna medida utilizar estas herramientas, hacer uso de actividades placenteras para olvidarnos un poco de aquello por lo que sufrimos...
¿Tú qué opinas?
Ester Álvarez
Psicóloga
Más información:
Science Direct:
Science Direct:
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0306460315002762
Mind Research Network:
Brain imagin shows playing Tetris leads to both brain efficiency and thicker cortex
Mind Research Network:
Brain imagin shows playing Tetris leads to both brain efficiency and thicker cortex